El término putada es una vulgaridad, sí. Es, también, una fotografía en alta resolución, ¿virtual? del Congreso de los Diputados. El caso es que los últimos dichos o hechos son vulgares, carecen de novedad e importancia, o de verdad y fundamento. En una situación como la que vivimos y atendiendo a la Real Academia de la Lengua, se suceden las putadas, es decir, las acciones malintencionadas que perjudican a alguien. ¡Que se jodan!
La propia «di putada» admitió que era un término impropio, aunque a la vista de lo ocurrido para ella debe de ser normal: ni ha dimitido ni la han cesado fulminantemente. ¿Es este un ejemplo de buena conducta?
El Presidente del Gobierno, en tan corta vida de legislatura, se ha convertido en otro «di putadas». Las dice con frecuencia. En un sólo día ha dicho que subía el IVA general del 18% al 21% y el reducido del 8% al 10%, que bajaba la prestación por desempleo, suspendía la paga de Navidad a los funcionarios y altos cargos, intervenía el control de las cuentas municipales, eliminaba la deducción por compra de vivienda, hacía mas pobres y dependientes a quienes ya poco tienen…¡varias barbaridades! En su lenguaje ni una palabra al crecimiento, ni un plan de futuro, nada.
El Ministro de Industria, Energía y Turismo, es otro personaje que cree en las «putadas». El conflicto del carbón es de libro. No habla de energía, de dependencia energética, de los desafíos a los que se enfrenta España en esta materia, de cuestiones apremiantes. Reproduce, en el Congreso de los «di putadas» un discurso huero, vano, provocador, indocumentado. Una y otra vez repite esa estadística con la que pretende enfrentar al sector del turismo con el de la minería, mezclando churras con merinas deliberadamente, tratando de halagar a unos para fomentar el odio hacia los otros, de atraer con datos falsos y despreciables apariencias.
Las consecuencias de recortar en Investigación son muy graves. Mañana seremos víctimas de un déficit para el que no existe rescate: el de la ignorancia.
Encima nos piden «complicidad»
(Dedicado a los mineros que hoy han salido de un encierro por LA DIGNIDAD ( GRAVEDAD Y DECORO DE LAS PERSONAS EN LA MANERA DE COMPORTARSE)
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Mira por donde el mundo si es un pañuelo.
Buen artículo