La última comunicación con Nader fue en 2007, aún conservo el mensaje. El amigo libio se despedía de la vida. Aprovechaba para contarnos algunas atrocidades del régimen del «asesino seductor de europeos». Nader se fué de Madrid en 1978, un día después de saber que dos de sus hermanos habían sido brutalmente asesinados, en Trípoli. En la última carta lamentaba que Muammar el Gadafi hubiera pisado suelo español…Mientras algunos miraban para otro lado, en Libia, la vida y la libertad podían ser aniquiladas. Parece que fue ayer. El lunes, la industria de la guerra, seguro, hará caja. Para algunos será un impulso económico.
Hoy recuerdo a Nader.