Esta es la cuestión que David Spergel, físico teórico, responsable científico del telescopio espacial WMAP, nos planteaba en Madrid, hace un par de meses. Spergel, profesor, ahora, en Princeton es uno de esos tipos comprometidos con el progreso del conocimiento. Predica con el ejemplo. Lo del Polo Norte venía a cuento del Big Bang. Es inquietante preguntarse qué hubo antes de la Gran Explosión.
Imagen de NASA
“Alcanzamos el límite del conocimiento. No sabemos aún la suficiente física para averiguar qué hubo antes del Big Bang. Tenemos que unir la física de la relatividad con la mecánica cuántica. Mis colegas trabajan en la teoría de cuerdas, y yo también trabajo en este asunto. Hay especulaciones sobre lo que hubo antes del Big Bang, por eso hay muchas respuestas posibles a esta cuestión. Una es la idea de que el tiempo comenzó con el Big Bang, por lo que no puedes preguntarte qué hubo antes del Big Bang… Es como preguntar que hay mas al Norte del Polo Norte. Por tanto, aquí tienes una posible respuesta. Otra posible respuesta es que el universo es cíclico, se contrae, alcanza una densidad máxima, vuelve a expandirse, y se contraerá de nuevo en el futuro. Vivimos en un universo de muchos ciclos, de colapso, expansión, por lo que no es que hubiera algo antes del Big Bang, sino que se trataba de un universo que se había colapsado. Otros imaginan que el universo nació como una posibilidad cuántica de entre muchas”.
Imagen de Revolución siria 2011
Con David Spergel hablamos de futuro, de lo que sabremos dentro de veinte años. Un nuevo blog, muy pronto, recogerá todas estas reflexiones. Mientras, a lo que íbamos, al Norte del Polo Norte, al mas allá de los límites del conocimiento posible pero, en conducta humana. Este arqueólogo del cosmos, cree que los hombres, en estos momentos, matan un 25% menos al resto de sus congéneres. Se siente esperanzado. Está convencido de que el 80% de los habitantes del planeta nunca darán marcha atrás en esto del rechazo a la guerra.
Si este experto en ponerle edad al Universo tiene razón, no sabemos qué impide a la humanidad hablar o expresarse libremente. Un referéndum planetario sobre la guerra daría resultados sorprendentes, nos devolvería a un estado de normalidad y nos permitiría escapar de la brutalidad no deseada.
La hipócrita escalada de violencia en el mundo, las cuentas de la guerra, la caja de la industria armamentística nos están matando. Nunca una minoría tan despreciable fue capaz de aplastar a una mayoría tan abrumadora. ¿A qué esperamos? En esto, al Norte del Polo Norte, estamos NOSOTROS
